EL COLLAR DEL SABIO
Había una vez una niña llamada Coda, Era una niña de un barrio pobre de China a quien le gustaba jugar y realizar actividades como: coser un suéter, subir a un puente o buscar a un duende.
Coda tenía una abuelita la cual era conocida en el pueblo por ser la más sabia de todos. Un día la abuelita se acercó a Coda y le dio un regalo, ella se sorprendió porque debido a su situación económica nunca le daban regalos. En la bolsa, la cual estaba con una envoltura rosada muy brillante con un moño amarillo más grande que su cabeza, estaba un collar plateado. La abuela le dijo a su nieta: ¨Éste collar es muy especial ya que mientras lo tengas puesto todo lo que quieras se hará realidad en tu mente, pero ten en cuenta que si lo usas mucho esto traerá consecuencias muy graves hacia tu persona. Coda no entendía que consecuencias podría traer tener todo lo que ella quisiera, pero a ella no le importó y aceptó el regaló.
El primer día se puso el collar esperando conseguir unas zapatillas azules, fue a la tienda y lo único que encontró a bajo precio fueron unos tenis blancos. Coda se puso triste debido a que ella creía que el collar no funcionaba, al llegar a su casa vio la bolsa donde traía los tenis, pero su sorpresa fue que en lugar de esos zapatos estaban las zapatillas que ella quería. Coda al ver que el collar sí funcionaba empezó a buscar más cosas.
A las pocas semanas consiguió una pila de cosas que, a la larga, no iba a utilizar, tales como: una pulsera, una diadema y una tijera dorada. Una tarde todo cambió debido a que empezó a notar algo diferente en su cuerpo, se sentía más cansada de lo normal y le dolía mucho la espalda. Fue corriendo con su abuela para decirle lo que le ocurría. La abuela se rio y le dijo: ¨yo te advertí que iba a ver consecuencias, ahora tienes un cuerpo de niña, pero por dentro tienes la contextura de una anciana¨. La niña empezó llorar, pero la abuela le dijo que se calmara ya que había remedio el cual era cerrar los ojos y agradecer por las cosas que tenía antes de tener el collar. Coda lo hizo y al poco tiempo todo lo que había conseguido con el collar desapareció, pero a ella no le importó ya a que se había dado cuenta que gracias al collar, había podido entender que no importaba lo poco que tenía ya que era afortunada de tenerlas. La abuela sacó una sonrisa y dijo; ahora ya sabes que más sabio que yo sólo hay uno y es el collar sabio¨.
"El agradecimiento es la memoria del corazón"
