

¿Te gustan los volcanes? ¿Te gusta vivir la vida al limite? Si es así este articulo es el correcto, te llenaremos de motivación para querer ir a escalar un volcán. Te presentaré mi experiencia escalando.




En Guatemala contamos con muchos volcanes a los cuales podemos acudir y disfrutar de los lindos paisajes, en algunos de los casos podemos observar volcanes haciendo erupción. Mi nombre es Paula Guillen y me gustaría compartirte la experiencia que tuve este año 2017.
Yo este año empecé a escalar los volcanes mas difíciles y bonitos de Guatemala, yo no creí que debía llevar una mochila con agua, comida, dulces, guantes, chumpa, manta térmica, entre otros. De hecho lo mas importante es llevar eso, pues uno nunca sabe como estará el volcán ese día, ya sea que este “despejado” o el peor de los casos “tapado”.
Al primer volcán que acudí fue el volcán de Fuego, ese día el volcán se encontraba con un clima espectacular, lo mejor que puedes hacer es hacer cumbre, el problema fue que al llegar a la mitad del volcán sufrí de calambres y tuve que bajar. Pero yo quería llegar y estuve entrenando para que cuando tuviera una oportunidad de ir a un volcán yo llegará a cumplir mi meta.
Y llegó la oportunidad perfecta, nos fuimos al volcán de Acatenango, cada vez el volcán se veía más y más grande, ya no quería pero la motivación de mi mamá me hizo querer escalar. Tras ir cansada vi a lo lejos como se acababa el camino, pero no era así! Faltaba la parte mas difícil, la parte donde llore. Pero se veía una cruz, esa era la cumbre!! Me sentí genial, presencié de una vista excelente, el clima estaba perfecto para dormir así que lo hice, pero recordé que teníamos que bajar. Esta fue la bajada más divertida, pues me caí 14 veces en frente de mi mamá.
“Quieres ir al volcán” palabras de mi papá, vamos pues, ¿Qué podemos perder? Y salió la escalada “padre e hija” tomamos la ruta fácil para asegurar nuestra cumbre, y así fue hicimos cumbre juntos, pero el clima no nos favoreció, no se miraba nada y no pudimos observar el volcán de fuego.
“Quieres ir al volcán” palabras de mi papá, vamos pues, ¿Qué podemos perder? Y salió la escalada “padre e hija” tomamos la ruta fácil para asegurar nuestra cumbre, y así fue hicimos cumbre juntos, pero el clima no nos favoreció, no se miraba nada y no pudimos observar el volcán de fuego.
“VIVE LA VIDA QUE DE TAL MANERA QUE NO TENGAS TIEMPO PARA QUEJARTE Y ASÍ SERAS FELIZ SIEMPRE”
